A día de hoy, una buena imagen es imprescindible para las personas. Muchas de las valoraciones que se realizan sobre alguien se centran en su aspecto físico. De este modo, elementos como la ropa, el maquillaje o artilugios para el pelo son esenciales en el día a día. Basta una cantidad de dinero no muy alta para llenar nuestro armario de prendas y de complementos que se adecúen a las nuevas tendencias. De este modo, ¿Qué nos impide vestirnos cómo queremos aceptando las reglas de una sociedad que da pasos adelante en grupo? Muy fácil, el sentido común. Es cierto que cada persona debe de hacer con su dinero lo que crea conveniente. Sin embargo, todos debemos de ser responsables de nuestros actos y de sus consecuencias. Y, a estas alturas, nadie debe de dudar del impacto que provoca la industria textil en el medio ambiente.
En Azacán, apostamos cada día por el comercio justo, por esos productos que cuidan del planeta y de las personas. Nos encontramos en Valladolid, pero siempre podemos hacer envíos con el fin de que lleguen a tu casa esos artículos con los que conseguirás que el mundo mejore, incluidos los del sector textil, aunque sea con pequeños pasos. Hasta el momento, también recogíamos ropa de los ciudadanos para las personas más vulnerables, llegando a atender a más de cien personas en este aspecto y habiendo salvado hasta 25 toneladas en todo este tiempo. Sin embargo, los miembros de esta asociación hemos pensado en que este procedimiento debe realizarlo Cáritas, con los que seguiremos colaborando. Ellos sabrán distribuirla y sacarla el máximo partido para que las familias necesitadas obtengan todo lo necesario para su día a día.
El medio ambiente y la industria textil, dos aspectos esenciales a tener en cuenta
El impacto de la industria textil en el medio ambiente es incuestionable. Sin embargo, rara vez nos paramos a pensarlo porque los anuncios, los escaparates y la gente que nos rodea nos invitan a estar de estreno de manera constante. Las modas cambian, y los colores que hoy se llevan mañana se quedan anticuados. Lo mismo sucede con las telas y las formas. Por ello, es imprescindible ser consciente la importancia de ser diferente y decirle “stop” a las compras innecesarias. No estamos hablando de que no compres nada, sino de que lo hagas con responsabilidad.
Uso del agua
¿Sabías que en la producción de ropa es necesario usar mucha agua? Por supuesto, también es esencial utilizar tierras para cultivar algodón, además de cualquier otra fibra. Por ejemplo, en un año, se pueden llegar a usar 79.000 millones de metros cúbicos de agua. De este modo, y para concretar, cada camiseta que compras ha necesitado para ser elaborada 2.700 litros de agua dulce, que es lo que una persona bebe en dos años y medio.
Contaminación del agua
Por otro lado, la industria textil, debido a los productos que se usan, como los tintes, es la responsable del veinte por ciento de la contaminación mundial de agua potable. El hecho de que se laven materiales sintéticos provoca que 0,5 millones de toneladas de microfibras caigan a las aguas del océano a nivel mundial. A lo anterior se suma que el 35% de los microplásticos primarios que se encuentran en la naturaleza sean responsabilidad de la producción de la ropa.
Gases de efecto invernadero
La industria textil está detrás del 10% de las emisiones de carbono a nivel mundial, superando las cantidades que emiten tanto el transporte marítimo como los vuelos internacionales. Así, podemos especificar que en un año, las compras de ropa de la Unión Europea provocaron 654 kilos de emisiones de CO2 por persona.
Los residuos de ropa en los vertederos
Por otro lado, hay que centrarse en aquella ropa de la que los ciudadanos se quieren deshacer. Normalmente, las personas tiran aquello que no usan, en vez de donarlas o de buscarlas una segunda vida. En la Unión Europea, desde el año 1996, la compra de ropa se ha visto aumentada en un 40% debido a que los precios son muy bajos en muchas tiendas. Ahora, esta bajada de tiempo también va acompañada de la reducción de la vida útil de las prendas. Cada año, en la Unión Europea, se consumen 26 kilos de ropa, mientras que se desechan cerca de 11 kilos. La mayoría, el 87%, es depositada en vertederos o incinerada.
Con todo, se hace evidente la importancia de aprender a concienciarse respecto a este tema. No se trata solo de gastar menos en cosas que no son imprescindibles, sino también de reducir el daño que se le provoca a la naturaleza día tras día.
¿Te gusta la ropa? Opta por tiendas de segunda mano
Es muy habitual que a las personas las guste estrenar nuevas prendas y complementos. Siempre hace ilusión mirarse al espejo y sentir que nuestro estilo lo mantenemos con modelitos de diez. Ahora, ¿por qué, en estos casos, no apostar por tiendas de ropa de segunda mano? Se trata de una manera de que el sector textil no provoque un gran impacto en el medio ambiente. Además de que encontrarás aquellas prendas que buscas, como camisetas, pantalones o cazadoras, las conseguirás a un menor precio, sabiendo que estás dando un paso adelante para que aquellas zonas verdes que te encanta contemplar y en las que te encanta respirar, se mantengan en las mejores condiciones posibles.
En Azacán, Valladolid, encontrarás esos vestidos, zapatos, abrigos, chaquetas y jerseys, entre otras muchas prendas, que se adaptarán perfectamente a tu figura. Además, cada día sentirás que te vistes de una manera sostenible, cuidando de los ríos, de las plantas, de los animales y de las personas que tanta calidad de vida pierden cuando el planeta se ve perjudicado por cualquier acción de estas características. Visítanos y descubre una nueva forma de ser feliz.